2
Corintios 4:8-9
8. Estamos acosados por problemas, pero
no estamos vencidos. Enfrentamos grandes
dificultades, pero no nos desesperamos.
9. Nos persiguen, pero Dios no nos
abandona NUNCA. Nos derriban, pero no
nos pueden destruir.
Es Pablo recordándonos que aunque estemos al
final de la noche, donde todo es más
oscuro, nunca pero nunca vamos a estar al final de la esperanza. Nosotros estamos sujetos al pecado, al
sufrimiento pero Dios Nunca nos abandona.
Todos nuestros riesgos, humillaciones y pruebas son oportunidades para
demostrar Él gran poder y la presencia
de Cristo en nuestras vidas.
En cualquier situación, por penosa que sea,
los hijos de Dios tienen en Él y de Él
consuelo, ayuda y fuerza., en las más
difíciles circunstancias siempre encontramos en Él consolación, en la
situación más difícil y peligrosa, siempre encontramos en Él soluciones.
Muchas veces nos dejamos agobiar por las
dificultades negándole la posibilidad a Dios a que nos ayude, porque ponemos
por encima de Él todos los obstáculos que podemos afrontar, olvidándonos de su
poder, de su amor, y que siempre ha estado con nosotros en las
situaciones más difíciles; perdonándonos, ayudándonos, sosteniéndonos, consolándonos,
sanándonos, proveyéndonos.
Oremos
Gracias Señor por estar aquí, por estar en mí sosteniéndome, ayudándome,
fortaleciéndome en medio de las pruebas. Gracias Señor por tu inmenso
amor, porque no miras mis errores y
horrores, simplemente me perdonas y haces borrón y cuenta nueva, tanto que haces nuevas tus misericordias cada
mañana. Gracias Señor porque todos los
días me justificas por medio de tu Hijo amado, Amen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario